«Una cámara hiperbárica para considerarse de calidad debe alcanzar idealmente las tres atmósferas. Aunque los tratamientos comúnmente utilizan presiones entre dos y dos con cinco atmósferas, existe una pequeña variedad de indicaciones que circunstancialmente necesitan presiones más elevadas, hasta dos con ocho atmósferas, por ejemplo, o incluso más bajas, uno punto cinco.

Pero eso sí, presiones por debajo de estas que te acabo de indicar, se considera que tienen un efecto mucho más limitado debido a que con tan poca presión, no se concibe disolver suficiente oxígeno en la sangre, que es la base fisiológica de la medicina hiperbárica y, por lo tanto, no alcanzaría los beneficios expresados en los estudios científicos realizados con medicina hiperbárica.

En estas circunstancias de baja presión, nos quedaríamos en un tratamiento que aportaría simplemente beneficios similares a los que hace la oxigenoterapia normobárica, es decir, la mascarilla que nos colocan, por ejemplo, cuando estamos ingresados en el hospital, que es muy buena y necesaria, pero no es medicina hiperbárica. Será el especialista en medicina hiperbárica el que determine cuánta presión es la necesaria para tu tratamiento.«

¿Cuál debe ser la presión atmosférica de un tratamiento de Medicina Hiperbárica?

El oxígeno hiperbárico es un medicamento y se debe realizar a la presión indicada por el médico especialista en medicina hiperbárica. Para que un tratamiento se considere medicina hiperbárica, la presión dentro de una cámara hiperbárica debe ser superior 1.4 ATA.

A continuación, se detalla la presión recomendada para tratar diferentes patologías, basadas en evidencia científica y recomendaciones de organismos como la Undersea and Hyperbaric Medical Society (UHMS) y el Instituto Karolinska de Estocolmo.

Algunos ejemplos de Presiones de Tratamiento en Medicina Hiperbárica:

El uso de estas presiones superiores a 1.4 ATA permite que el oxígeno sea disuelto en el plasma sanguíneo en concentraciones mucho mayores que las que se logran bajo presión atmosférica normal. Este incremento en la disponibilidad de oxígeno facilita la reparación de tejidos, combate infecciones resistentes a tratamientos convencionales, y mejora la respuesta a las terapias tradicionales como la radioterapia y la quimioterapia.

La presión en una cámara hiperbárica varía según la patología a tratar

Basándose en protocolos específicos respaldados por estudios científicos y recomendaciones de organismos como la UHMS y el Instituto Karolinska, estas presiones aseguran que los tratamientos sean efectivos y seguros para los pacientes.

Fuentes:

Undersea and Hyperbaric Medical Society (UHMS)

Instituto Karolinska de Estocolmo.

European Underwater and Baromedical Society (EUBS).